Los patrones, como su nombre lo indica, son formas de comportarnos ante ciertas situaciones de manera relativamente similar (repetitiva), de los cuales, al tomar consciencia de ello, en ciertos eventos problemáticos, podemos generar conductas alternativas para resolverlos. Es importante clarificar que los patrones no son siempre problemáticos, y son parte del funcionamiento regular de las personas, por lo que tampoco es necesario analizarlos siempre, pero en el caso que sean problemáticos puede ser de utilidad. Un ejemplo con el cual me identifico, desgraciadamente tiene que ver con la alimentación, donde siento que debo comer mejor y ejercitar al verme y sentirme gordo, lo cual me lleva a realizar dietas apresuradas o muy estrictas con ejercicio, lo cual brinda mucha ansiedad, que me lleva a comer nuevamente, trayendo sentimientos de culpa, haciendo que quiera ejercitar y realizar dieta nuevamente, con la frase de oro, “empiezo el lunes”. Los patrones pueden ser mucho más extensos, identificando otras conductas, pensamientos y sentimientos, pero considero que así se entiende la idea. Lo importante de poder ver estos patrones es que, cada paso puede ser modificado para generar un cambio del patrón completo, y con ello nuevas soluciones. Un ejercicio para ello:
1. Graficar los patrones: Llevarlo a hoja y papel, tiene muchos beneficios pues facilita la tarea de verlos, y con ello, poder identificar las partes donde vamos a actuar. En un inicio, si les cuesta mucho realizarlo solos, pueden recurrir a algún profesional de distintas áreas de salud que quizás podría apoyarlos a graficarlos, o sino con alguien de confianza, pueden efectuar la tarea en conjunto, siempre relevando el que sea cómodo y sin juicios.
2. Evaluar partes del patrón que podamos intervenir más fácilmente: En el ejemplo de arriba, utilizo el hacer dietas estrictas, por lo que pudiese ser bueno ir con una nutricionista, que tenga más información al respecto, o también trabajar desde mi ansiedad a nivel psicológico, o con actividades relajantes que puedan sumarse al ejercicio para bajar de peso.
3. Dar la oportunidad a las oportunidades: Es importante entender que los patrones muchas veces se construyen durante años, por lo que es difícil modificarlos. Cuando probemos cambiar algo, hagamos unos cuantos intentos, o un tiempo de prueba pertinente, pero no esperar que esto sea mágico y al día siguiente todo haya cambiado, así no se intenta una vez y se descarta si “falla”.
David Fuenzalida Cárdenas
Psicólogo Especialista en Psicoterapia Breve Centrada en Soluciones
